domingo, 30 de septiembre de 2012

Un buen guión

Hay gente por ahí que dice que hay un cine por ahí suelto que no necesita de un buen guión para sacar a la luz una buena película. No sé si se referirán a las pelis de acción de Chuck Norris o a los guiones de Lost, pero solamente digo que siempre que se hable de guión dentro del mundo del cine, se mire para atrás y rememoremos obras de mediados del siglo XX, incluso en la primera mitad... nos llevaríamos gratas sorpresas. También el mundillo ha evolucionado bastante, lo que en épocas pasadas solamente se tenía que fundamentar toda la base en el guión y en la fuerza narrativa de los actores, ahora puede que se edulcore con algo más y se acompañe de toda una revolución tecnológica. Una muestra sin más de un buen guión:

Otis B. Driftwood (Groucho Marx): Haga el favor de poner atención en al primera cláusula porque es muy importante. Dice que… la parte contratante de la primera parte será considerada como la parte contratante de la primera parte. ¿ Qué tal, está muy bien, eh?

Fiorello (Chico Marx): No, eso no está bien. Quisiera volver a oírlo.

Otis: Dice que… la parte contratante de la primera parte será considerada como la parte contratante de la primera parte.

Fiorello: Esta vez creo que suena mejor.

Otis: Si quiere se lo leo otra vez.

Fiorello: Tan solo la primera parte.

Otis: ¿Sobre la parte contratante de la primera parte?

Fiorello: No, solo la parte de la parte contratante de la primera parte.

Otis: Oiga, ¿por qué hemos de pelearnos por una tontería como ésta? La cortamos.

Fiorello: Sí, es demasiado largo. ¿Qué es lo que nos queda ahora?

Otis: Dice ahora… la parte contratante de la segunda parte será considerada como la parte contratante de la segunda parte.

Fiorello: Eso sí que no me gusta nada. Nunca segundas partes fueron buenas. Escuche, ¿por qué no hacemos que la primera parte de la segunda parte contratante sea la segunda parte de la primera parte?

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